Aunque no sea un "objeto", sino una parte de nuestro rostro que más se potencia en fotografía, la boca es sin duda "Ese objeto del deseo".
Este título no os resultará desconocido a los que sois cinéfilos, ya que alude al título de la última película del director de cine Luis Buñuel. En el que el deseo por una mujer, se convierte en el tema central de esta obra, usando ese humor negro del que hacía gala este director.
He podido observar y me voy a atrever a decir que existen bocas que expresan, es decir, bocas insinuantes, bocas dulces, bocas amargas, bocas esquivas, bocas sensuales, incluso bocas agresivas.
Helmut Newton, por algunos querido y por otros odiado, nos muestra una fotografía, del deseo que produce una boca y del deseo de ser besada, que refleja de esta manera tan sensual.
Acercar la mano a ella es una de las maneras más seductoras de incitar o provocar con ella, son muchos los fotógrafos que han usado esta pose para sus fotografías más sensuales.
El dedo hace sin duda de indicador de a donde debemos de dirigir nuestra mirada, lo comprobamos en estas imágenes.
Al ver estas fotografías, diríamos que son casi expontáneas, y que la mano se coloca de una manera causal en los labios, pero usando una de las frases de la película de Buñuel con la que hoy hemos dado título al blog, "subconscientemente, sabemos que la casualidad no existe". Todo lo que hacemos, como miramos como se mueve nuestro cuerpo o se expresa ante otros, y como responde este ante estímulos, no es casual.
Evidentemente, al ver estas fotos todos vemos la sensualidad y el deseo que provocan unos labios, una boca entreabierta, y unos dedos cerca de ella.
Otra manera diferente de fijar la atención y llevar nuestra mirada a ese "objeto del deseo" es con un objeto cerca de ella.
En cine y en fotografía otra de las imágenes más excitantes es ver a una mujer fumando, tal vez por ese recuerdo histórico de que las mujeres antiguamente lo hacían como acto de rebeldía.
Ese cigarro cerca de la boca, o el humo saliendo de ella, junto con la actitud de la modelo, dan fuerza y acción a esta imagen tan sensual e incluso arrogante.
Bocas que evocan dulzura y algunas otras deseo, las fundo y mezclo para esos altibajos de sensaciones que tanto me gustan.
Por último, mi especial selección como siempre, aunque esta vez he de reconoceros que la elección no sería muy justa puesto que hay muchas ya expuestas que me vuelven loca.
Pero se que os gusta saber cual es mi gusto, aunque nunca os confesaré el secreto de porqué, son estas y no otras, esa parte me permitiréis que me la guarde para mí.
¿Ya sabéis que boca es la vuestra o qué boca os apetece más fotografiar, filmar o besar?
Espero que "Ese oscuro objeto del deseo", sólo haya hecho aumentaros más las ganas de poseerlo de una u otra forma. Desde luego da mucho juego y como podéis observar, marca una diferencia clara entre unas personas y otras, la boca tiene expresión, no solo la mirada.
Hoy no fue nada fácil encontrar una frase con la que terminar este post, realmente no sabía si usar la palabra, deseo, labios, boca, beso, sensualidad....
Son tantos los adjetivos que se me vienen a la mente al ver estas imágenes que sería complicado decantarme por uno, pero finalmente he elegido esta cita de Dalmiro Sáenz, escritor argentino que nos habla así del deseo:
"Cuando acariciamos una piel queremos acariciar el deseo que despierta nuestro propio deseo en el otro. Una persona que no se calienta, no nos calienta"
Hasta pronto!!!
Ángeles Castro
